Nuestra asignatura de Habilidades Docentes y Gestión del aula continúa en su línea de interés
y motivación, en este caso me gustaría destacar una herramienta que hemos
trabajado, que desconocía y que me parece muy útil para incorporarla en nuestra
aula.
Si nos parásemos a pensar el tiempo que pasamos dentro del aula... ¿cuánto
tiempo podemos decir que estamos centrados de verdad en una actividad? o
¿sabemos realmente si nuestros alumnos están prestando atención todo el tiempo?
Cuando estamos trabajando y más en un idioma
extranjero, tenemos que mantener un nivel alto de concentración para
entender el mensaje. Si no hacemos pausas de vez en cuando, nuestro
cerebro satura y dejamos de estar atentos a lo que nos dicen.
Es importante plantearse si el tiempo que
pasan en clase los alumnos es rentable, y es complicado que todo lo sea, por
este motivo, he decido hablar hoy de los brain breaks.
El brain break es una actividad que suele durar entre 3-6 minutos, en ella
se intenta cambiar la rutina de clase, llevando nuestro pensamiento a otro
sitio. En estas actividades los alumnos cambian de forma radical la actividad
que están realizando durante un breve periodo de tiempo, suelen conllevar un
cambio de ubicación, un movimiento, para que el alumno participe de forma
activa y de esta forma pueda descansar su cerebro, a la vez que desconecta de
las ideas previas. De este modo, se facilita el procesamiento de la
información, se reactiva la atención y los procesos que son imprescindibles en
el aprendizaje de una lengua.
¿Por qué es conveniente hacerlos?
Los descansos son necesarios para darle un respiro a la mente, y que pueda seguir trabajando eficazmente.
En este cuadro se puede leer el tiempo que los alumnos pueden mantener la atención sostenida a distintas edades.
Los descansos son necesarios para darle un respiro a la mente, y que pueda seguir trabajando eficazmente.
En este cuadro se puede leer el tiempo que los alumnos pueden mantener la atención sostenida a distintas edades.
Estas pausas aseguran que los alumnos mejoran la concentración y alivian su estrés si estos descansos cerebrales los introducimos en el aula entre actividades cada 25-30 minutos.
Aquí os dejo algunos ejemplos sencillos de brain breaks:
·
Push game: en parejas, se ponen de pie frente unas de otras las manos
arriba. Empujando con sus manos únicamente intentan hacer mover los pies del
otro.
· De un lado a otro: decir una frase (ej. Me gusta el chocolate). Los alumnos van en un lado de la clase si les gusta, en otro lado si no les gusta o en medio si están em medio. Se puede hacer con muchas frases (gustos, animales domésticos, descripción física, etc.)
· Contrarios: El profesor dice una serie de acciones y el alumnado tendrá que hacer lo contrario de lo que dice en el sitio. Por ejemplo, si dice derecha tendrán que moverse hacia la izquierda.
· Simon says
· Imita el animal: en parejas, se entrega aleatoriamente a los alumnos tarjetas con animales, cada animal está repetido dos veces, por ejemplo, dos vacas, dos gatos, dos cerdos, serpientes, etc. Todos los estudiantes se ponen de pie en el centro de la clase y, a continuación, cada estudiante tiene que imitar el sonido y el movimiento del animal de su tarjeta hasta que encuentra a su pareja con el mismo animal.
· Reusar el vocabulario antiguo: el profesor hace el gesto y los alumnos lo dicen en el idioma. Hacerlo al revés. Usamos el método de Respuesta Física Total (TPR en inglés)
· Yoga: hacer algunos ejercicios de respiración y posturas sencillas como el árbol ayuda a refrescar la mente de los alumnos.
¡No debemos olvidar que estas actividades tienen que tener dos componentes muy importantes: MOTIVACIÓN Y DIVERSIÓN!
Espero que os gusten estas actividades, y que sean de utilidad para clase.
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